Oficinas son fuente de contagio de enfermedades
Su compañero de trabajo estornuda, no se cubre la nariz, luego tose, tampoco tapa su boca y, bueno si sus defensas son bajas, el resultado es esperable; en pocos días, también usted estornudará.
Los centros de trabajo son ambientes donde proliferan virus y bacterias sobre todo, si el personal descuida normas tan básicas, como, lavarse las manos, luego de ir al baño, y cubrir nariz y boca al estornudar y toser.
Recientes investigaciones internacionales demuestran, el riesgo para su salud, de un ambiente cargado de virus y gérmenes, como puede ocurrir en el trabajo.
El estudio más reciente afirma que un 20% de los franceses contrajo una enfermedad contagiosa, en su lugar de trabajo.
Los autores del informe, La gestión del bienestar y de la salud de los asalariados en su trabajo, indicaron que la mitad de quienes enfermaron recibieron una incapacidad por enfermedad.
Los investigadores recordaron que el ausentismo por enfermedad implica pérdidas para la empresa.
Su estudio fue patrocinado por la empresa Kimberly – Clark Profesional, y empleó datos de 250 diferentes compañías de Francia.
La investigación determinó que el promedio de gérmenes presentes en una oficina es 400 veces mayor al presente en la zona del inodoro.
Además, las zonas con una mayor concentración de microbios son lugares de uso común, como las puertas (38%); los botones del ascensor (29%); las barandillas (14.5%) y las máquinas distribuidoras (10.5%).
LAVADO DE MANOS. Los responsables del informe recordaron que acciones muy simples, como lavarse las manos antes de comer reduce el riesgo de contaminación hasta un 30%.
Sin embargo, un 25% de los trabajadores encuestados señalo que no cumplían dicha medida.
En una de las empresas que formo parte del estudio, se realizaron iniciativas, como colocación de carteles informativos y cambio de paños por servilletas de papel, en el baño.
Dichas medidas lograron una caída del 40% del ausentismo, por enfermedades, luego de 11 semanas de aplicar esas medidas.
“Una persona se mete la mano en la boca unas dos veces, por hora. Con este hábito, es fácil entender cómo ingresan los gérmenes del ambiente, y los objetos, al tubo digestivo” explicó el médico, Fredéric Saldmann, encargado de los consejos de higiene del informe de la empresa Kimberly – Clark.
“Esta demostrado, científicamente, que lavarse las manos, tras usar el baño y antes de comer, reduce el riesgo de afecciones, respiratorias y digestivas”
Fuente: La Nación, pag 18, VIVA, Domingo 24 de junio 2012.