Bebidas energéticas 1
Una moda para tratar con cautela
Seguirle el ritmo al ajetreo diario no es cosa fácil. ¿No ha tenido la percepción de que los días cada vez duran menos? Este mundo acelerado y sin lugar para el descanso, le ha dado a las bebidas energizantes un espacio para imponerse bajo la idea de suplir las energías agotadas.
Robarle unas horas de sueño a la noche para poder estudiar y tener energía adicional durante el día de trabajo son algunas de las razones más comunes por las cuales estudiantes y trabajadores consumen bebidas energéticas.
El tener más energía incrementa la capacidad para trabajar, una característica muy deseable para todos, especialmente para las personas activas. Por su formulación, todas las bebidas energéticas fueron creadas para proveer de energía adicional a un adulto por un periodo de 4 a 6 horas, entre estas Battery.
Si bien es cierto originariamente se trataron como sustancias complementarias para abastecerse de energía, en la actualidad las bebidas energéticas están siendo consumidas como cualquier otro tipo de refresco, sin tomar en cuenta los efectos que su consumo indebido puede ocasionar. Se deben consumirse con cuidado, pues hay que tener muy en claro que se trata de una bebida funcional, no es un refresco.
Lo que sí debe quedar claro es que no son bebidas hidratantes, como las que consumen deportistas para que su organismo se recupere tras una deshidratación, pues no contienen los electrolitos y sodio necesarios para ese fin. Se trata de una combinación de sustancias que teóricamente reponen la energía gastada, por cualquier tipo de actividad, pero no son sustitutas de agua.
